Cuánto tiempo de la vida invertiremos (o perderemos…?) ganando dinero que nunca se va a gastar?
Imposible de determinar. Pero seguramente, mucho.
Cuánto tiempo más trabajaremos para acumular posesiones o inversiones que con alta probabilidad serán aprovechadas (o desperdiciadas…?) por terceros, algunos de los cuales hoy ni siquiera conocemos?
Tampoco se puede saber. Pero seguramente, no será poco.
Qué tanto sí logrará aprovechar la DIAN, ese “tercero” que siempre estáy estará ahí, al acecho de cualquier debilidad en los patrimonios familiares, cada vez con más dientes y con más ideas nuevas?
Esta pregunta sí tiene fácil respuesta: Tanto como lo permitan una planificación y una ejecución deficientes de la gestión patrimonial.
No se trata, obvio, de gastarlo todo de manera desaforada. Se trata de mantener una reserva prudente, pero no tanto que nos corte las alas. Se trata de ir cumpliendo sueños y proyectos, de vivir la vida, de hacer más felices y más satisfechas con sus vidas (ojalá desde ahora mismo), a personas que elijamos, por dentro y por fuera de la familia.
Se trata de trascender. Pero no con el testamento, sino con acciones deliberadas, enfocadas e impactantes.
En WMI todos los días ayudamos a nuestros clientes (grupos familiares) a tomar las mejores y más oportunas decisiones para que los patrimonios tengan el mejor uso posible: Generar felicidad.
Aquí y ahora. En vida. A las personas.
Y no solo a la DIAN!
